El Atlético reincide en Turín
El Atlético de Madrid cayó derrotado, una vez más, en Turín. Esta vez, la Juventus se impuso por 1-0 con un solitario gol de Dybala en el que posiblemente pudo haber hecho algo más Jan Oblak. De esta forma, los del Cholo Simeone tendrán que cerrar su clasificación para los octavos de final en la última jornada ante el Lokomotiv, mientras que los italianos se aseguran el liderato del grupo.
Los rojiblancos regresaban al lugar del crimen. Aquel al que fueron testigos y cómplices de la remontada de la Juventus el curso pasado en esta misma competición. En un partido más importante, sí, por el hecho de ser eliminatoria, pero este también lo era. La primera plaza del grupo estaba en juego y el Atlético de Madrid volvió a reincidir, pero esta vez ofreciendo otra versión.
Sarri sorprendía dejando a Higuaín en el banquillo, pero el que ocupaba su puesto, posiblemente -o sin el adverbio, era mejor que el ex del Real Madrid. Era Dybala el que acompañaba en la delantera a Cristiano Ronaldo. Para pararles, por parte del Atlético, estaba Oblak y el muro defensivo del Atlético: Trippier, Felipe, Hermoso y Lodi. Por delante de ellos, Koke, Saúl, Thomas y Herrera, dejando a Vitolo y Morata como los futbolistas más adelantados.
Los hombres del Cholo Simeone salieron sin miedo. Cierto es que los primeros diez minutos fueron para la Vecchia Signora, pero ese control sólo se tradujo en un tiro cruzado de Dybala, que fue el mejor de su equipo, que atrapó sin problemas Jan Oblak. A partir de ahí, el Atlético espabiló y comenzó a competir de tú a tú al equipo que dirige Maurizio Sarri. La respuesta al disparo del argentino llegó en forma de zapatazo de Thomas que se marchó lejos de la portería juventina.
Con Koke en banda izquierda y Saúl en la opuesta, el Atlético se sentía cómodo con el balón en los pies y sin él, defendiendo de forma compacta e impidiendo que los italianos molestasen en exceso a Oblak. El que guiaba al conjunto rojiblanco era Héctor Herrera. El mexicano era el protagonista en la distribución del juego colchonero, era el único que encontraba pases sencillos sin regalar el esférico.
Revolución Dybala
Saúl, desde lejos, mandó el aviso más peligroso del primer acto… hasta el descuento. Zurdazo del futbolista ilicitano que casi sorprende a Szczesny, pero el guardameta polaco metió bien la mano para salvar a los suyos y evitar que Morata llegase al rechace. Entre tiro y tiro, alguna falta y alguna acción que lo parecía pero que el colegiado dejaba seguir el juego. Eso duró hasta que se cumplió la media hora. Hermoso se llevó la amarilla por derribar a Dybala cuando le había superado con un buen detalle técnico y minutos después, Bentancur por darle una patada a Vitolo.
Todo apuntaba a que ambos equipos se irían al vestuario con tablas en el marcador, pero en el tiempo de descuento llegó el mazazo de los transalpinos. Pongámonos en situación. Falta casi en la línea de fondo, sin ángulo, casi como si fuera un córner. Dybala al lanzamiento, su pierna izquierda… y zapatazo al que a Oblak se le cuela por encima de su cabeza. Gol, explotaba el Juventus Stadium, los colchoneros patidifusos a la par que anonadados y ambos equipos enfilaban la bocana para descansar un rato.
En la reanudación, el Atlético salió con la idea clara de igualar la contienda. La Juventus regaló un poco más la posesión al cuadro colchonero, que apretaba pero le costaba superar a la zaga de la Juventus. Saúl dio el primer aviso y Joao Félix el segundo a los pocos minutos de entrar al terreno de juego en lugar de Vitolo. También hizo lo mismo Correa, sustituyendo en este caso a un Héctor Herrera que había recibido la amarilla instantes atrás por picarse con Cristiano Ronaldo.
Morata no pudo rescatar un punto
No tardó en agotar su tercer cambio el Cholo Simeone. Le tocó entrar a Thomas Lemar, mientras que le tocó irse a Renan Lodi. Así, a Saúl le volvió a tocar pringar en el lateral izquierdo, perdiendo así el Atlético en la medular: sin Saúl y con un Lemar al que continúan esperando en la casa rojiblanca. Antes del cambio, la Juventus tuvo dos. Una a la contra, de Cristiano, que la mandó a las nubes, y la otra de Bernardeschi, que estrelló el cuero en el palo.
Seguía vivo el Atlético, pero el tiempo transcurría y no lograban empatar. Para lo que si hubo un rato fue para que la Juventus reclamase una roja para Felipe, que obviamente el VAR le dijo al colegiado que no lo era. Se acercaba el final del partido y Correa la tuvo, tras un pase de genio de Joao Félix, pero apareció un imperial De Ligt al cruce y desbarató las opciones de chut del futbolista argentino.
No fue suficiente Joao Félix. Esta vez Morata no pudo acudir al rescate, y eso que la tuvo en el 94′. Lemar continua desaparecido. Correa en la banda no rinde como de segundo delantero, aunque se compenetró bien con el joven futbolista portugués. Tras la de Morata, se llegó al pitido final, con el que la Juventus se asegura el liderato del grupo y el Atlético se la jugará en la última jornada bajo la presión del Bayer Leverkusen.